La semana pasada, Dana White sorprendió. En una sesión de preguntas y respuestas con los fanáticos para promocionar la pelea de Callum Walsh, el presidente de UFC anunció su ingreso al mundo del boxeo.
De hecho, el empresario se ganó el apoyo de importantes figuras del arte noble, como Mike Tyson. Consciente de la postura del excampeón mundial del deporte, el empresario se pronunció.
Programado para pelear contra Jake Paul en noviembre, el veterano celebró la probable entrada de Dana al boxeo y calificó el proyecto como «lo mejor que le sucederá al deporte«. Por ello, el presidente de UFC expresó su felicidad al recibir el apoyo de Tyson, su amigo, en su aventura en el tradicional deporte.
Es cierto que Dana no dio detalles sobre su proyecto boxístico, pero indicó que era solo cuestión de tiempo para trabajar en el deporte tradicional, posiblemente descubriendo talentos o incluso creando su propia organización. Cabe señalar que el presidente de UFC nunca ocultó su admiración por el deporte.
“Sabes lo que siento por Mike. Amo a Mike Tyson. Entonces, escuchar a Mike Tyson decir algo positivo es increíble”, declaró el presidente de la UFC en la rueda de prensa posterior a la Contender Series, celebrada el pasado martes (24).
La idea no es nueva
A pesar de liderar UFC durante años, Dana White siempre ha dejado en claro que es un fanáticao del boxeo. No en vano, el estadounidense constantemente da su opinión sobre lo que sucede en el deporte tradicional y expresa su admiración por ciertos luchadores.
De hecho, en 2017, el empresario fue uno de los encargados de promocionar el encuentro mediático entre Conor McGregor y Floyd Mayweather en el noble arte. En cualquier caso, Dana White seguirá siendo el principal representante de UFC y también de Power Slap, una liga de bofetadas.