Aunque su figura divide opiniones, Dana White es, sin duda, uno de los principales responsables del crecimiento de la UFC, y consecuentemente de las MMA.
Al frente de la organización desde 2001, el director es un hombre de negocios hábil y obsesionado por el trabajo, dispuesto a anteponer sus compromisos profesionales a su vida personal, como él mismo admite.
En una reciente entrevista con el podcast ‘Pound4Pound’, Dana reveló que su compromiso con su trabajo fue tal que incluso impactó en el nacimiento de uno de sus hijos.
Según el presidente de UFC, habría adelantado el nacimiento de Aidan White -hijo mediano del empresario- para que no coincidiera con la fecha de una importante pelea protagonizada por el ex campeón de peso semipesado Chuck Liddel.
«Cuando estaba construyendo este negocio, tenía una política general. No iba a la puta boda de nadie. No importaba quién eras o lo cerca que éramos. No iba a la puta boda de nadie. Las bodas requieren tiempo, energía… El nacimiento de mi hijo Aidan fue (en la misma fecha que) Chuck Liddell contra alguien. Cambié su fecha de nacimiento por la pelea de Chuck Liddell . Le dije: ‘Sí, eso no va a funcionar’. Tenemos una gran pelea por delante. Entonces mi esposa tuvo una cesárea. ‘Tendremos que sacarlo de allí temprano porque esto no va a funcionar para mí'», recordó Dana White.
Dana White y UFC
Desde 2001, cuando a UFC la compraron los hermanos Lorenzo y Frank Fertitta, Dana White se desempeña como presidente de la compañía.
El director se mantuvo en su cargo incluso después de la venta de la organización a ‘Endeavor’. Durante este período, bajo el mando del sombrero de copa, UFC se convirtió en la liga de MMA más grande del planeta y creció significativamente tanto en popularidad como en valor de mercado.