Al parecer, Dana White no fanfarroneaba cuando aseguró que la superpelea entre Jon Jones y Tom Aspinall sí se materializaría.
Aunque el plan se fue al traste con la noticia del retiro de ‘Bones’, el presidente de UFC reiteró que sí existía un acuerdo para que ambos se enfrentaran y unificaran los títulos de peso pesado. Sin embargo, un cambio de postura del veterano estadounidense alteró el curso de la negociación.
En una conversación con la prensa este domingo, el director también abordó la reciente noticia de que Jon Jones se convirtió en blanco de una acusación penal, tras haber estado presuntamente involucrado en un accidente de tráfico y huido del lugar.
Sin conocer los detalles, Dana no especificó si el caso pudo haber sido crucial en la decisión de Jon de retirarse. Por otro lado, el presidente de UFC reveló que el ahora excampeón de peso pesado cambió de opinión sobre medir fuerzas con Aspinall tras, aparentemente, aceptar la pelea.
«Me enteré de los problemas legales de Jones. Cuando lo vi hoy, pensé: ‘Todos pensarán que por eso se retiró’. Quizás por eso se retiró. ¿Quién sabe? No lo sé. Esas son las preguntas que hay que hacerle. Teníamos esta pelea [con Aspinall] asegurada. Me vieron hablar con mucha confianza, que esta pelea se iba a dar. Pero luego cambió de opinión», dijo Dana en una reciente conferencia de prensa, según MMA Fighting.
¿Quién será el retador al título?
Con Jon Jones oficialmente fuera de la ecuación y Aspinall ascendido a campeón lineal, la gran incógnita ahora gira en torno a quién será el próximo retador al cinturón de la categoría. El favorito para la oportunidad por el título parece ser Ciryl Gane, excampeón interino de la categoría, actualmente número 2 del ranking y un nuevo reto para Tom. También fuera de la lista está el brasileño Jailton Almeida, con dos victorias en su haber. Ahora queda por ver qué camino tomarán los altos mandos de UFC para el futuro de la división.