El 23 de enero, Dustin Poirier y Conor McGregor se enfrentarán nuevamente en el octágono más famoso del mundo. Los dos luchadores hacen la pelea principal de UFC 257, en un duelo válido por el peso ligero (155 lbs), que aún no tiene lugar confirmado. Pero si en la ocasión anterior, el irlandés ganó por nocaut en la primera ronda, esta vez la situación será diferente. Al menos eso es lo que espera Dana White, presidente de la UFC.
En un comunicado al sitio web ‘BT Sports’, el líder de la UFC destacó la evolución de los dos luchadores y afirmó que no es posible trazar un paralelo entre la primera y la segunda pelea para resaltar cómo será el resultado de la revancha. Cabe mencionar que luego de la primera pelea, McGregor fue campeón de peso pluma (145 lbs) en 2015 y campeón de peso ligero en 2016, mientras que Poirier ganó el título interino de hasta 155 libras en 2019.
“Es una pelea completamente diferente. Obviamente, Conor es un luchador mucho mejor de lo que era cuando lo enfrentó por primera vez, al igual que Poirier. No sé cómo se desarrollará en la pelea ahora, pero definitivamente es interesante. No puedes mirar la primera pelea y decir: ‘Oh, así es exactamente como volverá a suceder’. Porque no será así. Espero que sea una buena pelea”, reveló Dana White.
Conor McGregor y Dustin Poirier se enfrentaron por primera vez en septiembre de 2014, cuando ambos peleadores aún competían en peso pluma. El irlandés, que luego se convertiría en campeón de esta división y también en el peso ligero UFC, ganó al estadounidense por nocaut técnico en el primer asalto, en ese momento.