Cuando entre en el ‘Apex’ para llegar al octágono este sábado (27), en UFC Vegas 91, Ariane ya no estampará el conocido apellido Lipski en el chándal de su organización, sino el nuevo ‘da Silva’. Más que un cambio de nomenclatura, la brasileña ha sufrido una transformación personal, que incluso afectó a su apodo de ‘Reina de la Violencia’ en las artes marciales mixtas. En una entrevista exclusiva con Ag Fight, el peso mosca (125 lb) de Curitiba explicó la importancia de la religión durante este proceso.
Desde que emigró a los EE. UU. para perfeccionar aún más sus habilidades como atleta, Ariane ha estado en proceso de solicitar una tarjeta verde. Debido a procesos burocráticos, la brasileña aún no ha agregado el apellido ‘da Silva’ de su esposo y entrenador Renato en sus documentos oficiales. Pero el certificado de nacimiento fue suficiente para que la UFC aceptara el intercambio y motivara a la número 12 del ranking de menores de 125 libras a presentar su ‘nueva versión’ en el octágono.
—Así es, Ariane Lipski da Silva. Ya tenía la ‘da Silva’ (después de casarme), pero estoy en el proceso: solicitamos la ‘tarjeta verde’. Nuestro abogado ha conseguido no cambiar nuestros documentos todavía para no causar ningún problema. Así que está en el certificado (de matrimonio), pero no había eso en los documentos, tanto en Brasil como aquí. Pero le pregunté a la UFC si aceptaban el certificado y lo hicieron, así que ‘da Silva’ funcionó. Es mi segundo nombre (Lipski), ahora soy una persona nueva. Una nueva persona con un nuevo nombre, Lipski da Silva», reveló el peso mosca.
Los manantiales de la iglesia y la lucha por un propósito
No fue solo su apellido lo que Ariane decidió cambiar en su carrera. Anteriormente conocida por el apodo de ‘Reina de la Violencia’, la brasileña destacó que cambió su apodo a simplemente ‘La Reina’, excluyendo ‘Violencia’, por lo que garantiza que ya no competirá. Dicha transformación pasa directamente por la llegada de la ‘Iglesia de las Fuentes’ a la vida del deportista.
Con sede en Florida (EE.UU.), la Iglesia también acoge a otros grandes nombres de las MMA brasileñas que aparecen en la UFC, como Gregory Robocop, Gilbert Durinho y Vicente Luque. En noviembre de 2023, Ariane fue bautizada en ‘Mananciais’. Desde entonces, la luchadora ha afirmado que está cerca de Jesucristo y que compite por un nuevo propósito.
«Soy una persona nueva porque entregué mi vida a Jesús, me ha ido transformando. Mi espíritu ha estado transformando mi alma, lo que ha estado transformando mi cuerpo y transformando mi vida. Sentí la necesidad de hacerlo público, así que es Ariane Lipski da Silva. Apodada ‘La Reina’, ya no es ‘Reina de la Violencia’. Ya no lucho por la violencia, lucho por otro propósito. Me bauticé en noviembre del año pasado, no me bauticé. Pero ha pasado un año desde que encontré la Iglesia Springs allí en Florida, lo cual ha sido una bendición en mi vida. Ya había asistido a otras iglesias, pero todavía no había entregado realmente mi vida a Jesús», celebró Ariane.
Buena fase y ‘prueba de fuego’ por delante
Numerosa número 12 en el ranking de menores de 125 libras , Ariane lleva una larga racha de victorias en la UFC. Solo en 2023, hubo tres triunfos en la empresa de MMA más famosa del mundo. Los resultados positivos, combinados con el aumento del rendimiento, fueron suficientes para que la brasileña eligiera la última temporada como la mejor de su carrera como luchadora profesional. Sin embargo, frente a su compatriota Karine ‘Killer’, la oriunda de Curitiba tendrá una verdadera prueba de fuego, ya que su rival se mantiene invicta en la UFC y ocupa el puesto 13 en la división.