Fueron casi doce meses de rumores que apuntaban el cierre de los pesos-moscas (57 kg) en el UFC. En el último movimiento que apuntaba a este escenario, la dimisión masiva de atletas de la categoría dejaron menos que los habituales 15 nombres necesarios para componer el ranking de la división. Sin embargo, el brasileño Jussier ‘Formiga’ nunca renunció.
Número uno de la lista y escalado para enfrentar a Joseph Benavidez el próximo día 29 de junio, el atleta de America Top Team afirma que siempre creyó en la permanencia de su categoría, hecho que sólo fue confirmado por Dana White cuando Henry Cejudo venció a Marlon Moraes y se convirtió en campeón en dos divisiones de peso simultáneamente.
«Los medios especulaban mucho, pero el UFC nunca me había dado una posición, pero cada vez que peleana, los medios me preguntaban sobre esto, pero después de Cejudo vs Marlon por lo menos Dana puso una piedra en el asunto. Tenemos mucha leña para quemar aún», analizó durante conversación con el reportero de la Ag. Fight.
Como el campeón Cejudo terminó facturando el título de los gallos y virtualmente está escalado para defender su puesto entre los moscas en su próxima aparición, el ganador de la pelea entre Formiga y Benavidez, número uno y dos del ranking respectivamente, estará con los focos orientados hacia ellos el día 29. Y el brasileño demuestra optimismo con la proximidad de garantizar su oportunidad de disputar el título del evento.
«El Dana me dijo que quería ver mi pelea con Benavidez, que de allí saldría el próximo contendiente. Vamos a la guerra, salir en los golpes el número uno contra el número dos en una revancha», animado conto Jussier, antes de subrayar que el nocaut que sufrió en el round inicial en el primer duelo contra el estadounidense no se repetirá.