Después de no poder salir con la mano en alto, tras su enfrentamiento ante Marlon ‘Chito’ Vera, el peleador Guido Canetti habló en exclusiva para AG Fight y dejó en claro que su situación no fue la mejor aquella tarde de noviembre de 2018, cuando sucumbió ante los embates de un rival que, para su desgracia, tuvo una participación extraordinaria en la gala de UFC Fight Night 140 celebrada en Argentina; evento que fue estelarizado por el compromiso entre Magny y Ponzinibbio. Notablemente arrepentido, el nacido en Buenos Aires, Argentina, reconoció que fue muy complicado levantarse de aquel mal momento, pues incluso tuvo que realizar ajustes dentro de su equipo para poder salir de agujero anímico en el que se encontraba. No obstante el mal momento, se dijo convencido para poder retomar el camino del triunfo; toda vez que logre concretar un triunfo ante el peligroso Danaa Batgerel, en una contienda que se llevará a cabo en Las Vegas, como parte de la cartelera de UFC 248. “Es complicado reponerse de un resultado adverso, sobre todo cuando los malos momentos aparecen de una forma recurrente; sin embargo, uno aprende de los errores y busca la manera de salir adelante. En mi caso, tuve que hacer ajustes en mi entrenamiento, en mi alimentación y en mi estrategia; fue un cambio radical, pues incluso tuve que prescindir de algunas personas que trabajaban conmigo”, manifestó el peleador que actualmente ostenta un récord de 8-4-0. Del mismo modo, expuso que a sus 40 años aún le queda mucho que ofrecer; razón por la cual, descarta toda posibilidad de retirarse: “Eso del retiro no lo tengo en mente, por ahora estoy enfocado en mi siguiente pelea. Sé que muchos piensan que ya no tengo nada que ofrecer pero eso no es verdad, aún tengo mucho por qué pelear. A mis 40 años me siento a un nivel bastante bueno, sobre todo, me siento con el compromiso de ofrecer una mejor versión de mi… al menos una que supere a la versión que presenté durante mi último combate”. Motivado por la función de este sábado siete de marzo, el ‘Ninja’ se dio tiempo para disculparse con sus seguidores; con la intención, también, de agradecer el apoyo que le han brindado, sobre todo aquel que ha recibido de sus seres queridos y de quienes le profesan lealtad pese a las distancias geográficas o temporales. “Estoy en mi campamento desde hace unas semanas (en los Estados Unidos), concentrado para mi siguiente combate y no es fácil tener lejos a la gente que amas. Más allá de extrañarlos, me siento en deuda con ellos. Sé que les fallé, así como a todos aquellos que han venido apoyándome pero, por esa misma razón, ahora estoy aquí más convencido que nunca: buscando ofrecer una gran pelea y cambiando mi estrategia de entrenamiento. Antes me cansaba mucho y me agotaba con facilidad debido a que no tenía una gran estrategia, pero ahora esa situación ha cambiado y francamente no pienso desperdiciar todo el tiempo de trabajo que he invertido”, señaló, al tiempo de reconocer que Latinoamérica está de su lado. 
“Ha crecido la participación de latinoamericanos en UFC y eso me hace sentir muy contento, no sólo por el hecho del apoyo que uno recibe, sino por todas las oportunidades que se han abierto para peleadores de Argentina, Brasil, México, Chile y demás. Eso también es motivo de esfuerzo; si la gente de UFC observa que los latinos somos buenos, habrá muchas más oportunidades y eso, sin duda, motiva a cualquier peleador”, finalizó sin hacer comentarios de su rival, quien llegará con una derrota a cuestas; la cual, sufrió en UFC Shengzhen ante Heila Alateng el pasado mes de agosto. «No es que no me guste hablar de mis oponentes, simplemente es un tema de respeto. Sé que es bueno y no pienso entrar en detalles; estoy concentrado en lo que yo puedo hacer. Como señalé antes, me siento bastante bien y eso es lo importante. En mi cabeza no hay espacio para pensar en rivales, futuros o retiros, es tiempo de concentrarme en el presente y en lo que yo como peleador puedo ofrecer”, culminó.
