Colby Covington, ex retador al cinturón del peso wélter de la UFC (170 lb), definió los planes para sus próximas semanas. Sin tener un duelo programado en la organización, el estadounidense se ofreció como voluntario para ser reserva de la disputa por el título que involucra a Kamaru Usman y Jorge Masvidal, prevista para el próximo 24 de abril.
Según el luchador, actualmente número uno del ranking, nada más natural que su nombre forme parte de la conversación. Después de todo, además de la posición privilegiada en la selecta lista, Colby tiene una rivalidad con las dos principales estrellas de la cartelera del UFC 261, que se llevará a cabo en Florida (EE.UU.).
“Analizaré las cosas cuando ocurra la pelea. Todo el mundo sabe que UFC no me dijo nada, pero creo que se explica por sí mismo que soy el luchador de reserva. Si pasa algo, si alguien contrae COVID, si alguien se pone amarillo y se va de la pelea, ahí estaré”, indicó durante una entrevista con el canal ‘El Schmo’.
Otro factor que apoya el argumento del peso wélter es que vive y entrena en la misma ciudad donde se realizará el evento. De esta forma, una invitación de última hora no significa un problema para que llegue a tiempo y listo para el duelo.
“Estamos en Miami, Florida. Eso significa tres horas y media, cuatro horas en automóvil. Tomo un autobús a Jacksonville (ciudad donde se llevará a cabo el evento) y llego para la pelea. Voy a estar allí. Si sale alguien de la pelea, entro y lo analizamos desde ahí. Solo quiero aprovechar el mejor momento de mi carrera”, finalizó.
En su última actuación en el octágono, Colby derrotó a Tyron Woodley por nocaut técnico, en septiembre de 2020. Antes de eso, el norteamericano fue noqueado por el nigeriano Kamaru Usman, actual campeón de la división y que hará su cuarta defensa del cinturón ante Masvidal.