Carlos ‘Boi’ mantiene la confianza en pelear en el UFC 250 y advierte a su rival: «Vas a recibir una paliza»

Luego de que su debut en UFC se pospuso en tres momentos, Carlos ‘Boi’ vive con otra incertidumbre a falta de casi un mes para su pelea. Designado para enfrentar a Sergey Spivak el próximo 9 de mayo, el brasileño no sabe dónde actuará debido a la incertidumbre sobre el lugar, que originalmente estaba programado para São Paulo, pero debe ser reubicado en los Estados Unidos debido a la pandemia de coronavirus. Todavía esperando una posición oficial de la organización, el peso pesado destacó a la multitud para que realmente pueda actuar en la fecha programada.

A través de una entrevista exclusiva con el informe de Ag.Fight, el luchador admitió que no le importará actuar en un evento sin audiencia o incluso fuera de Brasil. La voluntad de ‘Boi’, quien todavía está invicto en su carrera después de ocho peleas, es poner fin a este destino y poder debutar pronto en la franquicia, que estaba cerca de suceder en el UFC Brasilia, que se celebró el 14 de marzo, y también en otro evento programado para el 28 del último mes.

“Realmente espero el evento. Puede ser puertas cerradas, porque estoy enfocado en la pelea y eso no hace la diferencia. Quiero golpear a alguien, no le importa a miles de personas, o solo a nosotros. Va a ser golpeado, eso está escrito. Él va a recibir una paliza. El lugar tampoco importa, pero por supuesto tenemos que respetar las medidas de seguridad debido a toda esta pandemia”, dijo el atleta, que fue contratado por el UFC en 2017, pero que solo podrá actuar ahora después de cumplir dos años de suspensión por tener sido atrapado en una prueba de dopaje.

“Estoy ansioso por sentir esa lucha contra la adrenalina nuevamente. Lo espero con ansias. Pero nada que se interponga en mi entrenamiento. Mi cabeza está bien, cuanto más posponga mi pelea, peor será para mi oponente. Estoy acumulando deseo y alguien pagará el precio con la ansiedad, el nerviosismo y la ira acumulados por todo esto. Pelearé con él en una hora”, agregó el bahiano.

Con los gimnasios cerrados en todo Brasil, siguiendo las recomendaciones de cuarentena a causa de COVID-19, Carlos explicó cómo mantiene su entrenamiento, ya que no ha dejado de estar activo apuntando a UFC 250. Con la ayuda de un amigo, el peso -heavy continúa agudizando su parte de MMA, pero en el aspecto físico, usa las escaleras del edificio para mantenerse al día con el gas.

“No hay mucho que hacer, ¿verdad? Estoy preparado, entrenando con los recursos disponibles. Respeta la cuarentena y entrena en casa. Desde el principio traje a un amigo para que se quedara aquí conmigo y estamos entrenando juntos. Hago la preparación en el garaje, desde la parte física sigo subiendo y bajando las escaleras del edificio. Me las arreglo de la manera que puedo», reveló el luchador que tiene seis victorias por nocaut en su récord.

Actualmente, la categoría de peso pesado tiene dos luchadores brasileños en el top 15. Uno de ellos es Junior ‘Cigano’, uno y ex campeón de la división y el otro es Augusto Sakai, quien ha surgido como una de las promesas de la nueva generación. Consciente de la misión de llevar otro nombre del país a una clase que ya lo defiende de Brasil, ‘Boi’ rechazó la presión y criticó a sus compañeros de equipo.

“Digo que la categoría de peso pesado es aburrida. Nadie provoca, nadie intercambia barb. Todo se basa en lo políticamente correcto. No me gusta. Voy a cambiar un poco la cara de esta categoría, para generar una controversia. ¿La división tiene buenas peleas? Tiene. Pero carece de ese movimiento que veo en otras categorías, como el peso ligero (70 kg). Pero no me siento presionado. Cuanta más presión, mejor», agregó.