A solo un día del UFC 314, Bryce Mitchell volvió a llamar la atención, esta vez no por sus teorías conspirativas, sino por una declaración sorprendente. Durante la conferencia de prensa previa a la pelea, el estadounidense reaccionó con sarcasmo a una advertencia de Jean Silva, su próximo oponente, quien afirmó que podría terminar “con daño cerebral” después de la pelea. ¿La respuesta? «Nací con daño cerebral, hermano. Estaré bien».
El discurso, que mezclaba provocación con humor ácido, fue noticia. Esta no es la primera vez que Mitchell, de 29 años, genera controversia con declaraciones fuera del octágono. Conocido por promover teorías como que la Tierra es plana e incluso por declaraciones antisemitas y polémicas vinculadas a figuras como Adolf Hitler, el luchador lleva consigo un aura de provocación -algo que, para muchos, ya ha superado los límites de lo aceptable en el deporte, siendo criticado incluso por Dana White.
A pesar de su personalidad excéntrica, ‘Thug Nasty’ parece tomar en serio la amenaza que representa el brasileño. ‘The Lord’, por su parte, no escatimó en provocaciones. En una reciente conferencia de prensa, incluso trajo un globo terráqueo para burlarse de las creencias de su rival. “Pronto empezarás a ver el mundo redondo”, bromeó Jean Silva, provocando risas del público y de la prensa presente.
Aun así, Mitchell sorprendió a todos al darle un elogio inesperado a su oponente el pasado miércoles (9). El estadounidense reforzó que vencer a su rival brasileño sería una prueba de su valía en el ranking de peso pluma (145 lb), donde ocupa el puesto 13, elogiando su calidad.
“Creo que vendió la pelea a la perfección, y estoy muy agradecido por ello. Nadie podría haberla promocionado mejor que él, así que me quito el sombrero ante él. Es decir, la gente lo está viendo gracias a él. Es un gran peleador. Si le gano, quizás eso me haga aún más que grande”, dijo, con un tono más sobrio, en una entrevista exclusiva con Ag Fight.
La pelea entre Bryce Mitchell y Jean Silva está programada para este sábado (12), en Miami, y es una de las más esperadas de la cartelera. Además del aspecto técnico —ambos son nombres en ascenso en la división—, el duelo ganó una narrativa llena de tensión, ironía y, por supuesto, mucha rivalidad.