A sus 28 años, Brendan Allen atraviesa su mejor etapa desde que se unió a la UFC en 2019. Con una racha de seis victorias consecutivas en la compañía, el estadounidense se ha disparado en el ranking y ahora ocupa el sexto lugar en la división de peso mediano (185 lb). Este sábado (6), en el evento estelar de UFC Vegas 90, ‘All In’, como se le conoce, tendrá la oportunidad de enfrentarse a Chris Curtis, el último rival que lo derrotó en su carrera. En vísperas de la revancha, el atleta de ‘Kill Cliff FC’ destaca qué factor podría ser crucial en la pelea: su evolución mental.
En una entrevista exclusiva con el equipo de reporteros de Ag Fight, Allen admitió que su nivel técnico no ha cambiado significativamente desde su derrota ante Curtis en diciembre de 2021. Por otro lado, el estadounidense se considera un competidor mucho más capaz a poco más de dos años del enfrentamiento debido al fortalecimiento mental construido durante este período.
«Realmente creo que, técnicamente, estoy bastante cerca de lo que hubo (la primera pelea). Pero la diferencia ahora es que soy más capaz mentalmente de lidiar con la presión y las emociones asociadas a la pelea. Me permite ser más yo mismo en la jaula. Creo que la gran diferencia esta vez es el enfoque. Estaré concentrado, 100% preparado y listo. La última vez (que peleamos), no creo que estuviera concentrado, por la razón que sea. Esta vez estoy enfocado, listo para salir y ser la mejor versión de mí mismo que pueda ser. Si puede vencerme así, que Dios lo bendiga y me quito el sombrero ante él, probablemente tenga ‘mi número’. Voy a ir allí y ganar y seré el No. 5 la próxima semana», dijo Brendan.
Punto de inflexión en su carrera
Contrariamente a lo que muchos pueden imaginar, el «punto de inflexión» en la carrera de Allen no estuvo motivado por la derrota ante Curtis, de la que no tiene remordimientos, por el contexto y la falta de preparación ideal, sino por una victoria poco convincente. En junio de 2022, Brendan derrotó a Jacob Malkoun por decisión unánime en una pelea ‘tibia’. Según el estadounidense, el rendimiento por debajo de su capacidad real en ese momento encendió una advertencia y lo hizo evolucionar gradualmente, especialmente mentalmente.
«Chris Curtis entró la última vez (sustituyendo) y volverá a entrar. La diferencia es que esta vez tuvimos más tiempo para prepararnos el uno para el otro. Somos dos jugadores, vamos a dar un espectáculo. Es una sensación dura. La derrota te cambia un poco, ya sea para bien o para mal. Esa pérdida no creo que me haya afectado demasiado, porque, en mi mente, me atraparon. Fue con una semana de anticipación (que peleamos). Me atraparon. Es frustrante, pero sucede. Creo que me afectó mucho la pelea con Malkoun, ahí es donde realmente aprendí. A pesar de que salí con la victoria, afortunadamente, el rendimiento ni siquiera se acercó a mis habilidades. Esa fue la (pelea) que me hizo mirarme en el espejo y buscar el entrenamiento para mi mentalidad que necesitaba», recordó ‘All In’.
