Después de perder el duelo verde-amarillo ante Natália Silva, en septiembre del año pasado, Jéssica Andrade ya tiene fecha, lugar y rival definido para regresar al octágono y buscar la recuperación. El próximo 10 de mayo, Jéssica Andrade se enfrentará a la canadiense Jasmine Jasudavicius en la cartelera UFC 315, en Montreal (CAN). La noticia quedó divulgada por la propia organización, el lunes (24), a través de las redes sociales (ver abajo o haga clic aquí ).
La ex campeona de peso paja UFC (115 lb), Jéssica Bate-Estaca, ingresará una vez más al octágono para competir en la división de peso mosca (125 lb). Esta ha sido una constante en los últimos años, ya que la atleta brasileña ha dividido la atención de su carrera entre las dos categorías de peso.
En sus últimas tres peleas, por ejemplo, la peleadora de Paraná derrotó a sus compatriotas Mackenzie Dern y Marina Rodríguez en la división paja y, posteriormente, cayó derrotada por la minera Natália Silva, en pelea válida para la división de peso mosca de la UFC. Actualmente, ‘Bate-Estaca‘ ocupa posiciones destacadas en los rankings de ambas categorías: 4º lugar en peso paja y 7º lugar en la lista hasta 125 libras.
Verduga de la escuadra brasileña
La próxima rival de Bate-Estaca en UFC, Jasmine Jasudavicius, viene en ascenso dentro de la entidad, y parte de su éxito se puede atribuir a que la canadiense es una especie de ‘verdugo’ de las brasileñas. Desde su debut en el UFC, en 2022, la atleta norteamericana ya se ha enfrentado a cinco peleadores del ‘Brazilian Squad’, habiendo derrotado a cuatro de ellos.
La única derrota de Jasudavicius ante una brasileña en el UFC ocurrió en junio de 2022, todavía en su segunda aparición en la liga. En aquella ocasión, la canadiense fue derrotada por la minera Natália Silva, última verdugo del Bate-Estaca, en decisión unánime de los jueces. Desde entonces, Jasmine ha dejado atrás a Gabriella Fernandes, Priscila Pedrita, Ariane Lipski y Mayra Sheetara, respectivamente.