Luego de anunciar su cambió del peso semicompleto (205 lb) al peso pesado (265 lb) de la UFC, Jon Jones vio su nombre figurar entre las principales discusiones de los deportes de combate. A pesar de que la estrella de las MMA actuó por última vez en 2020 y aún no ha debutado en la nueva categoría, su llegada a la misma ya ha dado que hablar, teniendo a Daniel Cormier como uno de sus críticos y a Michael Bisping como uno de sus defensores.
En su canal en ‘YouTube’, el excampeón de la UFC y actual comentarista recordó que no se puede dudar de Jones, pues ha demostrado en varias ocasiones que es un destacado luchador en el octágono. Según Cormier, ‘Bones’ tendrá problemas para lidiar con oponentes del nivel de Ciryl Gane, poseedor del cinturón de la división, y Francis Ngannou, dueño del título lineal en la división.
Sin embargo, el británico destacó que el ícono de las MMA está acostumbrado a enfrentar y dominar a oponentes de los más variados estilos y destacó que su experiencia, movimiento y coeficiente intelectual de pelea pueden marcar la diferencia en la división. En sus últimas apariciones en el octágono, Jones realizó actuaciones poco inspiradoras, pero como dejó en claro que su sueño es ser el campeón del peso pesado de la UFC, la expectativa de los fanáticos y de Bisping es que la leyenda de la modalidad actúe motivado para expandir su legado.
“Tengo que estar en desacuerdo con Cormier. Conoce a Jones, pero no le cae bien y creo que tal vez eso está sesgando un poco su juicio. Cormier dice que Jones ha estado alejado del deporte durante mucho tiempo, que habrá una falta de ritmo de pelea, que Ngannou y Gane son una raza diferente de peso pesado. Tal vez tenga razón, pero si hablamos de actuaciones, Jones es probablemente el mejor peleador de todos los tiempos. Derrotó a todos a su estilo”, analizó el excampeón de la UFC.
A pesar del apoyo de Michael Bisping, la carrera de Jon Jones, de 34 años de edad, en la UFC no es buena. Tras anunciar que subiría al peso pesado, ‘Bones’ se concentró en su preparación y, visiblemente, su cuerpo sufrió cambios.
Así, el regreso del atleta al semicompleto, categoría que dominó, es inviable. Así que, para mantenerse en la actual división y enfrentarse por el título a Francis Ngannou o Ciryl Gane, el estadounidense tendrá que aceptar la cantidad que Dana White está dispuesto a pagar o convencer al presidente de la organización de que valore su pase, algo que parece poco probable.