En buena o mala fase, Conor McGregor suele ser el centro de atención. Incluso derrotado en la última aparición, la próxima cita del ex campeón de peso pluma (145 lbs) y peso ligero (155 lbs) será la trilogía con Dustin Poirier, en UFC 264, que se lleva a cabo el 10 de julio, en Las Vegas (EE. UU.) , y la comunidad de MMA espera ansiosamente la reunión decisiva. Sin embargo, Michael Bisping reveló que teme por el futuro de la estrella.
En una entrevista con ‘TalkSPORT.com’, Bisping mostró pesimismo al analizar el momento actual de McGregor en MMA y lo que podría pasar si no cambia de postura. Para la revancha ante Poirier, celebrada en enero en Abu Dhabi (EAU), el irlandés sorprendió a algunos de los aficionados al presentar una versión sin el uso del conocido ‘trash talk’ y, como no había peleado en un año, fue noqueado en el segundo asalto.
Según Bisping, McGregor se ha convertido en un luchador menos dedicado, por lo que sufrió el traumático resultado. El ex campeón de la UFC justificó su posición citando la situación económica del irlandés, quien se acostumbró a la lujosa rutina. La postura de ‘The Count’ van de la mano con el líder de la compañía, Dana White, quien cuestionó si ‘Notorious’ todavía tiene interés en ser un atleta de MMA.
“McGregor en los viejos tiempos es como yo en los viejos tiempos. Ya no existe. Soy un buen tipo, soy un gato domesticado, pero solía ser una pesadilla. Con McGregor, es lo mismo. Está comprando yates y relojes de un millón de dólares. Lo conducen en un Rolls Royce. Holyfield dijo que es difícil salir a correr a las seis de la mañana, cuando estás durmiendo sobre sábanas de seda”, dijo Bisping, antes de completar.
“Los luchadores tienen hambre, quieren regresar. Les gusta pelear, esa es la única esperanza. Su sueño es ganar dinero, cambiar sus vidas y McGregor lo hizo con estilo. Esto no es un insulto, es solo la realidad de la situación. Esto no significa que no pueda ir allí y jugar bien y ganar. Puede, pero será una pelea difícil”, concluyó.
La historia entre Conor McGregor y Dustin Poirier comenzó en 2014. En la primera pelea, el ambiente entre los atletas fue hostil y el irlandés noqueó a ‘The Diamond’ en menos de dos minutos. En la revancha, el estadounidense devolvió el golpe a ‘Notorious’ de la misma forma, en un duelo que estuvo marcado por el respeto entre las partes.
Ahora, el ex campeón de peso pluma y peso ligero de la UFC adopta una postura más desafiante. Para la trilogía, McGregor mostró confianza, advirtió que corregirá los errores cometidos en el segundo choque contra Poirier y prometió dar a sus fanáticos una actuación impactante para romper la rivalidad.