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‘Bate-Estaca’ revela la razón para volver al peso mosca y celebra la actuación en el UFC París

Después de ganar su pelea de regreso al peso paja de la UFC (115 lb) celebrada en abril, parecía que Jessica Andrade se enfocaría en recuperar la división. Sin embargo, la excampeona de la categoría, siempre dispuesta a aprovechar las buenas oportunidades que se presentan en la empresa, aceptó regresar al peso mosca (125 lb) para reemplazar a Katlyn Chookagian en el duelo ante la promesa Manon Fiorot, en el evento de la organización en Francia en septiembre. Y, aun peleando en casa de la rival, el ‘Bate-Estaca’ celebra el nuevo compromiso.

En entrevista exclusiva con Ag. Fight, Jessica reveló que, en realidad, su prioridad era continuar con su trayectoria en el peso paja, pero explicó que terminó frustrada por la falta de iniciativa de las demás integrantes de la categoría. Como nunca cerró las puertas al peso mosca y se mantuvo clasificada en la división, la brasileña aceptó la nueva aventura ante oponentes más grandes, ya que nunca se dejó intimidar por la desventaja física.

Cabe mencionar que ‘Bate-Estaca’ ocupa el sexto lugar del ranking hasta las 115 lb y es dueña del cuarto lugar en la tabla de clasificación hasta las 125 lb. La curiosidad es que, a pesar de ser excampeona de la UFC, la brasileña muestra humildad y aprueba el estatus de una verdadera trabajadora de las MMA, ya que no crea complicaciones ni exige actuar.

“Mi intención era quedarme en la paja, pero, con la falta de oponentes, vine a reemplazar a Chookagian para no quedarme sin pelear. Las chicas de mi división no querían pelear conmigo, la pelea por el cinturón no iba a suceder, así que decidí aceptarlo. Luchar contra peleadoras de peso mosca es muy bueno, puedes entrenar duro. Yo, a los 30, ser una peleadora en la UFC es impresionante. Dentro de mi carrera, es mi vértice”, declaró la excampeona de la UFC.

Ahora, Jessica peleará en Francia contra la principal luchadora del país en la UFC, pero quien crea que teme la presión de actuar en territorio enemigo se equivoca. De hecho, no será la primera vez que ‘Bate-Estaca’ acude a casa de su rival. En 2013, la brasileña enfrentó a la británica Rosi Sexton, en Inglaterra, y la castigó. En 2019, la brasileña enfrentó a Zhang Weili, en China, y perdió su cinturón de peso paja tras ser noqueada en 42 segundos. Por eso, la atleta busca amarrar la historia y no esconde la emoción de ser parte de la atracción de París, en otra edición importante para la empresa.

«No interfieras. Incluso porque, cuando peleamos con los estadounidenses, estamos en su casa, es automatico. Nunca tendremos un 100% de posibilidades de pelear con la multitud a nuestro favor, a menos que sea en casa. Pero como estoy acostumbrada, no hay problema. Creo que pelear en la casa del oponente es aún más agradable, porque si ganamos, nos ganamos el amor de los fanáticos allí también. Es histórico para la UFC hacer esta primera edición en París y estar en la cartelera es aún mejor para mí. Llevo toda mi carrera haciendo historia con sumisiones, nocauts, peleando en lugares que no tuve la oportunidad de tener. París será un lugar realmente genial y definitivamente estará lleno”, declaró la peleadora.

En su carrera en la UFC, Jessica Andrade, de 30 años, dejó un rastro de destrucción en el peso paja. En la categoría, la excampeona superó a atletas como Amanda Lemos, Angela Hill, Cláudia Gadelha, Jessica Penne, Joanne Calderwood, Karolina Kowalkiewicz, Rose Namajunas y Tecia Torres. Actualmente, ‘Bate-Estaca’ ocupa el sexto lugar en la división y es la séptima en el ranking libra por libra femenino.

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