Dos semanas después de dar positivo por COVID-19 y ser sacada de la cartelera del UFC Las Vegas 26, en la que se enfrentaría a la estadounidense Angela Hill, Amanda Ribas sigue aislada en una habitación de hotel en Las Vegas (EE.UU.), a la espera de autorización médica. Habiendo sufrido fuertes síntomas de la enfermedad y con su futuro regreso a los entrenamientos todavía rodeado de incertidumbre, la peso paja (115 lb) descarta la reprogramación inmediata de su pelea, incluso si le hace ‘perder’ a su oponente original.
Luego de la cancelación de la pelea entre Ribas y Hill, algunos rumores apuntaban a la reprogramación de la misma para el próximo 5 de junio, como parte de la cartelera del UFC Las Vegas 28. Pero, según la propia luchadora de Minas Gerais, esa posibilidad ya está descartada. En una entrevista exclusiva con el informe de Ag. Fight, Amanda citó el final de julio como una fecha de regreso más realista.
Si se confirma la predicción de la ‘carioca’, es posible que deba elegirse un nuevo oponente, dado que su oponente original, la veterana Angela Hill, es conocida por ser siempre lo más activa posible y, por lo tanto, es posible que no espere a la atleta. A pesar de no ocultar su preferencia por enfrentar a la estadounidense, incluso porque ya completó un campo de entrenamiento completo centrado en esta disputa, admite que, debido a su situación aún incierta, no pudo ‘sujetar’ a su rival y evitar que compita.
«No por ahora. Incluso lo programó para el 5 (de junio). Eso era yo: ‘Vamos a marcar pronto’. Solo entonces vino un dolor de cabeza, tosiendo, durmiendo, dentro de la habitación. Como peleas en dos semanas, sin entrenar y sin saber cómo reaccionarás en los entrenamientos. Ese es el trato. Porque para mí estoy bien, pero luego salgo a correr…”, reflexionó Ribas, antes de desvelar la posibilidad de volver al octágono a finales de julio.
“Estábamos hablando de esto. Quizás en julio. Creo que sí. Si Dios quiere y todo va bien, si esta prueba ya es negativa. Podré entrenar y julio creo que es una buena fecha, finales de julio. (…) Me gustaría que fuera ella (Angela Hill), pero si aparece otra, yo también estoy aquí. Porque creo que ella también quiere pelear. Sostenerlo es una guarra”, concluyó.
Luego de iniciar su carrera en la UFC con cuatro victorias consecutivas y posicionarse como una de las nuevas sensaciones de la división paja, Amanda Ribas vio su secuencia interrumpida por su compatriota Marina Rodríguez, en enero de este año, cuando fue noqueada en el número de la edición. 257, celebrada en ‘Fight Island’ en Abu Dhabi (EAU). A pesar de haber sufrido el primer revés en el octágono de la UFC, la luchadora de Minas Gerais aún mantiene su lugar en el top 15 de la categoría, ocupando el puesto 11 del ranking.