El tan esperado regreso de Jon Jones al octágono de la UFC es uno de los más esperados por la comunidad de la lucha en los últimos tiempos. Sin pelear desde febrero del año pasado, unos meses antes de renunciar al cinturón de peso semicompleto (205 lb) y anunciar su intención de ascender en la categoría, ‘Bones’ -en medio de un impasse financiero con la empresa y en proceso de ganar peso- todavía sigue sin pronóstico para su debut en la nueva división. Pero su situación ha sido actualizada por un miembro importante de su equipo.
Contratado como asesor por el excampeón de peso semicompleto, Richard Schaefer, que participó en el programa ‘MMA Hour’, reveló que originalmente el equipo del estadounidense estaba trabajando para su regreso a finales de este año, pero el propio Jon Jones decidió posponer el calendario debido al proceso deaumento de peso.
Según el profesional -conocido promotor del boxeo, quien durante años se desempeñó como CEO de ‘Golden Boy Promotions’- Jones se encuentra actualmente cerca del límite de peso pesado de la UFC, con un peso alrededor de las 260 lb, pero el objetivo del luchador sería alcanzar, de manera saludable, 275 lb antes de su debut en la división, encajando definitivamente entre los deportistas de mayor masa de la categoría.
“Él dijo, ‘mira, no voy a estar listo en noviembre o diciembre. Quiero subir de peso. Quiero ganar peso de una manera inteligente, de una manera estratégica, no solo ganar peso y ser un gran peso pesado. Quiero ganar el peso correcto’”, dijo Schaefer, antes de continuar.
“Por cierto, ayer hablé con él. Pesa 260 libras ahora, 260 (libras) de músculo, fuerza y explosividad. Su objetivo es subir a 275 y básicamente ser el peso pesado más grande y más malo que haya visto la UFC”, concluyó el asesor.
Desde el anuncio de que subiría a peso pesado, Jon Jones ha compartido, a través de sus redes sociales, algunas imágenes de su proceso de aumento de peso, mostrando los cambios visibles que ha estado atravesando su cuerpo. Sin embargo, además del problema físico, el excampeón de peso semicompleto tiene otro obstáculo que superar antes de debutar en la nueva división: llegar a un acuerdo salarial con la UFC. En los últimos tiempos, ‘Bones’ ha estado librando una batalla con la organización en busca de una mayor valoración financiera y el embrollo no parece cercano a su fin.