A los 44 años, Silva planea el final de su carrera en el MMA – Fábio Oberlaender
Ex-campeón de peso medio (84 kg) del UFC y dueño de algunos récords históricos en la organización, Anderson Silva sigue en actividad a los 44 años. El atleta parece motivado para seguir enfrentando a atletas más jóvenes y fuertes, como Jared Cannonier, su rival de este sábado (11), en la cartelera que se realizará en la ciudad de Río de Janeiro, e incluso lejos del ápice de su forma física.
En esta ocasión, incluso viniendo de derrota, Spider está con la moral elevada en la organización debido al gran desempeño presentado ante Israel Adesanya. Por esto, el veterano aprovechó para evadir siempre que fue cuestionado sobre una fecha límite para terminar sus actividades en el octágono más famoso del mundo.
«Es porque incluso amo el deporte, amo lo que hago. Ya estaba en mis planes antes, ya planeé retirarme. Pero termine dando marcha atrás porque me gusta mucho lo que hago», afirmó durante conversación con periodistas este jueves (9), cuando subrayó que su situación financiera ya está resuelta «hace bastante tiempo (risas)».
Financieramente estable y sin nada más que probar en el deporte, el brasileño parece disfrutar del puesto de veterano en el que está actualmente. El atleta más viejo en actividad en el evento y uno de los mayores ganadores de todos los tiempos, Spider es el peleador perfecto para dar consejos a la nueva generación del deporte. Y nada mejor que verlo de cerca en la ciudad donde alcanzó el auge de su carrera.
«Compartir octágono con Aldo, esta fiera aquí a mi lado, y todos los demás brasileños, es muy gratificante, formar parte de esta selección de atletas que representarán a Brasil el sábado es fantástico. Aldo, tengo cariño grande por él, él representa mucho para todos nosotros, siempre es bueno estar en la misma cartelera que él», analizó, con una sonrisa abierta.
Sin la presión de competir por resultados como en el pasado, Anderson se da el lujo de presentarse en lugares que le dan sentido. En cartelera en Brasil, casi como una especie de despedida, el veterano parece más dispuesto a disfrutar del apoyo de los fans que cualquier otra cosa.
«Hay un aire diferente. Pelear en Brasil es siempre gratificante por la energía que el pueblo brasileño termina otorgando. Es diferente, pelear en Brasil tiene un mayor gusto. (…) es gratificante después de tanto tiempo, de todo lo que hicimos, por lo que trabajamos por este deporte, tener este reconocimiento. Brasil tiene un pueblo muy acogedor, son hinchas asiduos», enalteció, antes de volver a ponerse a disposición para un duelo contra Conor McGregor.
«Por lo que representa dentro del octágono, es un gran atleta que sabe vender peleas de la manera correcta, sería un gran desafío, dos chicos eclécticos que pelean bien en pie, sería un gran espectáculo para el público. (…) Sería en un peso acordado. pero lo que impide … impide no, tiene que ser pensado con más calma, pero tiene que preguntárselo a Dana (White, presidente del UFC)», finalizó.