Unos días después de noquear a Magomed Ankalaev en la pelea estelar de UFC 320 , el pasado sábado (4) en Las Vegas (EE. UU.), y recuperar el cinturón de peso semipesado (205 lb) de la principal organización de MMA del mundo, Alex «Poatan» Pereira regresó a Brasil. Poco después de su llegada a su país natal, el campeón tuvo una recepción muy especial.
Esto se debe a que, al llegar a Brasil, el campeón de la UFC se propuso visitar el Instituto Poatan, un proyecto social que abrió en el barrio Batistini de São Bernardo do Campo, São Paulo, enfocado en la educación y el desarrollo de los jóvenes de la región donde creció. Allí, Alex fue recibido con cariño por los niños y adolescentes que forman parte de la iniciativa comunitaria, que atiende a jóvenes de cuatro a 17 años.
Rodeado de los niños del proyecto, quienes coreaban su apodo, Poatan aprovechó la oportunidad para liderar el cántico de «Chama», una expresión que se ha convertido en su sello distintivo en el mundo de la lucha. El luchador también firmó autógrafos y se tomó fotos con los jóvenes atendidos por el instituto.
Lesión
Las imágenes también muestran que Alex Poatan aún usa una bota ortopédica en su pie derecho. Poco después de su pelea contra Ankalaev en UFC 320, el atacante paulista reveló que sufrió una posible fractura, resultado de las patadas que le propinó a su rival ruso durante el combate. La gravedad de la lesión aún no se ha confirmado, pero se espera que lo mantenga fuera de acción por un tiempo.
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