El sábado pasado (4), en la pelea estelar de UFC 320, la arrolladora victoria de Alex Pereira sobre Magomed Ankalaev devolvió el orgullo y la alegría a muchos aficionados brasileños de las MMA. Y quien lo garantiza es el protagonista de la noche en Las Vegas (EE. UU.).
En una entrevista con la prensa tras su triunfo sobre el luchador ruso, a la que asistió el equipo de Ag. Fight, ‘Poatan’ destacó que su regreso a la cima de la categoría de peso semicompleto (205 lb) también es fundamental para impulsar el mercado nacional.
Antes de que ‘Poatan’ recuperara su título, Brasil solo contaba con un atleta que ostentaba el cinturón en la compañía: Alexandre Pantoja. A pesar de ser uno de los campeones más dominantes de la liga, no es particularmente popular. Por lo tanto, una persona como Alex, capaz de conmover a la audiencia y a las masas, es crucial para revitalizar las MMA en el país. Los informes que recibe Pereira reflejan esta realidad.
«Esta victoria es muy importante para el mercado brasileño. Mucha gente decía: ‘Me desanima ver UFC y las MMA’. Eso es cierto en Brasil. Recibo muchos mensajes y la gente me dice: ‘Ahora que te veo, todo ha cambiado’. Me alegra mucho oír eso, haber logrado devolverle esa alegría a la afición. Y definitivamente estoy abriendo puertas. Este cinturón es muy importante. Charles (Do Bronx) también peleará ahora. Nuestras victorias, como dos brasileños que realmente destacan y que llevan el nombre del país, son muy importantes», analizó.
¿Jon Jones en la Casa Blanca?
El plan ideal de Alex Pereira sin duda podría atraer la atención del público brasileño. Después de todo, tras el UFC 320, el campeón de 205 lb puso en la mira una superpelea contra Jon Jones, el mejor de todos los tiempos de las MMA, en la cartelera de la compañía programada para la Casa Blanca en junio de 2026. De concretarse, el duelo tiene el potencial de convertirse en uno de los más emblemáticos de la organización, tanto desde el punto de vista deportivo como comercial con los aficionados.