Para intentar superar su mala fase, Herbert Burns vuelve a la acción este sábado (17), en la cartelera UFC 305, en Australia, contra el atleta local Jack Jenkins. Con la necesidad de volver a ganar para dejar atrás cualquier ‘fantasma’ de despido, el brasileño peso pluma (145 lb) espera poder -con espíritu renovado y mucho trabajo hecho- poder presentar una nueva versión de sí mismo dentro del octágono.
Luego de iniciar su carrera en UFC de manera prometedora, con dos victorias consecutivas, el peleador brasileño ha sufrido derrotas y lesiones en sus últimas apariciones en la organización. El mal momento de su carrera hizo que Herbert Burns perdiera parte de su confianza, como él mismo admitió en una entrevista exclusiva con Ag Fight.
“Estas lesiones realmente me obstaculizaron mucho. Me quitaron algo de confianza en mis habilidades. No sabía si mi cuerpo sería capaz de soportar el ritmo de mi técnica y mi cabeza. Fue mucho trabajo duro. Mis actuaciones fueron deficientes en estas últimas peleas porque no estaba al 100% físicamente y no tenía la confianza que debería tener. Entonces, después de esta última pelea, me tomé un tiempo libre, decidí centrarme un poco más en mi lado espiritual, resolví todos los problemas que tenía en mi vida personal y hoy en día estoy muy concentrado en entrenar, en mi gimnasio y ahora esta pelea que llegó en el último minuto”, comentó.
Trabajo duro y nueva versión
Consciente de la necesidad de volver a ganar para permanecer en el róster de UFC, Herbert Burns se centró en el trabajo duro como forma de recuperar su carrera. Esta, de hecho, fue la razón por la que el peso pluma niterói aceptó a última hora la pelea de este sábado, contra Jack Jenkins, con apenas dos semanas de anticipación. Bien físicamente y con su salud mental recuperada, Burns promete mostrar una versión mejorada dentro de la jaula.
“La única manera, cuando las cosas no van bien, es trabajar duro, trabajar más duro. Eso es lo que he estado haciendo. Bajé la cabeza, ni siquiera publiqué mucho en las redes sociales, simplemente trabajé duro, trabajé, trabajé, trabajé, el doble de duro de lo que ya había trabajado. Tengo mucho respeto por mí, por mi equipo, por mi familia, por mis fans, y creo que mis últimas actuaciones no fueron dignas de lo que puedo mostrar dentro del octágono. Entonces, lo que hice fue agachar la cabeza y trabajar, y ahora tendré la oportunidad de mostrar una nueva versión de mí”, concluyó Burns.
A sus 36 años, Herbert Burns suma 11 victorias -ocho de ellas por sumisión- y cinco derrotas en su récord profesional de MMA. Por otro lado, el australiano Jack Jenkins, su oponente en UFC 305, este sábado, acumula 12 victorias -cinco por nocaut- y tres reveses en su carrera.