Jon Jones obtuvo un apoyo algo inesperado para liberarse de otra polémica más. Recientemente, Daniel Cormier defendió a su gran rival de dos delitos menores en relación a un presunto episodio que involucró a agentes antidopaje de ‘Drug Free Sport’, ocurrido en marzo, en Nuevo México (EE.UU.).
En su canal ‘YouTube’, el exluchador y actual comentarista minimizó el episodio protagonizado por Jones. El campeón de peso pesado de UFC está siendo acusado de agresión e interferencia con las comunicaciones luego de un presunto encuentro con agentes de pruebas de drogas que lo visitaron en su casa para recolectar orina y sangre.
Al defenderse, ‘Bones’ afirmó que recibió la visita de agentes de la empresa cuando estaba descansando y negó haberles amenazado. Consciente del caso, ‘DC’ compró la versión del rival.
«Para ser completamente honesto, todo el tiempo pensé que esto era una tontería. Si mal no recuerdo, fue temprano en la mañana o tarde en la noche donde podría haber estado en casa tomando unas copas. Sé que todos juzgamos rápidamente a Jones por sus problemas pasados, pero la realidad es que si un hombre está en tu casa y está tomando unas copas, ¿Cuál es el problema? Es tu derecho. Si llegan los agentes y él está un poco molesto, quizás las interacciones no sean tan divertidas ni tan fáciles como en otras ocasiones», declaró ‘DC’.
El historial de Jones influyó
Siempre que puede, Cormier pincha a Jon Jones, dejando claro que la animosidad entre ellos, creada en UFC, sigue viva. Sin embargo, el veterano no cataloga el actual caso como tan grave como para poner en riesgo la carrera de ‘Bones’. De hecho, según ‘DC’, lo ocurrido sólo está teniendo repercusiones por la problemática historia de Jon a nivel personal y profesional.
«Siempre pensé que era una tontería. No creo que pase mucho. Porque él es quien es, siempre es una historia. Realmente no creo que esto sea gran cosa. Algunas de las cosas que sucedieron en el pasado fueron mucho más graves. Simplemente soy un tipo al que no le gusta otro tipo y que defiende a este tipo porque sé que todo es una mierda”, concluyó Cormier.
El caso
El incidente habría ocurrido en marzo, cuando la presunta víctima, identificada como Crystal Martínez, llegó a la casa del peleador para recolectar una muestra de orina que sería utilizada en una prueba antidopaje.
Según el informe policial, el campeón de UFC inicialmente cooperó al recibir al empleado y a otro representante de ‘Drug Free Sport’ en su casa. Sin embargo, después de supuestamente no orinar para la prueba, Jones se puso agitado y tenso.
Por ello, Crystal ofreció a ‘Bones’ la opción de recogerle una muestra de sangre para el test antidoping. En el reporte a la policía, el inspector informó que el luchador parecía agitado y tenso, comenzó a hacer una serie de preguntas y amenazó con demandarlos, además de tomar su celular y grabarlos.
Asustada, Martínez reveló que pensó que Jon Jones iba a atacarla, ya que se encontraba a menos de treinta centímetros de ella durante el presunto incidente, y que consideró abandonar el lugar sin la muestra recolectada.
Es cierto que Crystal explicó a la policía que Jones accedió a hacerse la prueba de orina, acudiendo a un lugar de la casa con otro empleado de la agencia para realizarla.
Sin embargo, cuando los dos regresaron, la inspectora destacó que su compañera de trabajo estaba pálida y nerviosa, cometiendo errores inusuales en el procedimiento de recolección de muestras. En su informe, Martínez detalló que el peleador parecía estar ebrio y que olía alcohol saliendo de él.