El Salón de la Fama de UFC cuenta con varios atletas que dejaron una huella en la organización y ayudaron a promover el deporte en sus inicios. A pesar de reconocer la importancia de innumerables nombres de renombre, el tema divide la opinión de los aficionados, que constantemente señalan la ausencia de figuras cruciales en la historia del deporte.
Marco Ruas es uno de estos luchadores. Y al parecer esta no es sólo una opinión de los fans. Miembro del selecto grupo UFC en el ala ‘Pioneiros’, Mark Coleman también defendió la incorporación del brasileño en una entrevista exclusiva con el equipo de Ag. Fight.
Coleman y Ruas fueron contemporáneos, pero nunca se cruzaron durante sus respectivas carreras. ‘Hammer’, como le conocen, admitió que le hubiera gustado enfrentarse al brasileño y no ocultó su admiración por el estilo de Marco. Pionero de este deporte, el ‘Rey de las Calles’ es considerado el ‘padre del cross-training’, un concepto que se basaba en especializarse en distintas áreas de las artes marciales mixtas, sin permitir lagunas y grandes diferencias técnicas en cada sector.
“Muchos (de mi época) se lo merecen. Quizás Marco Ruas, es uno de mis (peleadores) favoritos. Espero que entre (al Salón de la Fama de UFC). Eso es todo en lo que puedo pensar ahora. Muchos se lo merecen, pero sí, Marco Ruas. Ojalá hubiera podido luchar contra él también. Quizás podamos pelear, él todavía está en buena forma (risas). No creo (que alguna vez estuvimos cerca de enfrentarnos). Su nombre nunca me llegó. Sé que todos en Brasil lo aman y lo quieren allí (Salón de la Fama). Por eso me vino a la mente su nombre”, dijo el estadounidense.
El legado de Marco Ruas
Originario de Río, Marco Ruas comenzó su carrera cuando el deporte todavía se llamaba ‘Vale Tudo’ y los luchadores competían para defender sus artes marciales originales, para descubrir cuál era la mejor. Pese a ello, el ‘Rey de las Calles’ optó por superarse en diferentes modalidades, convirtiéndose en un luchador completo en todos los ámbitos, capaz de ‘mantenerse firme’ en los combates de pie o en el suelo.
Debido a su postura visionaria, el brasileño es visto como uno de los pioneros de lo que sería el actual MMA moderno. A través de su juego completo, inusual para la época, Marco Ruas ganó el torneo UFC 7, en septiembre de 1995, al vencer en la misma noche a tres oponentes: Larry Cureton, Remco Pardoel y Paul Varelans, los dos primeros por sumisión y el último por técnica knockear.
