Como no podía ser de otra manera, la pelea entre Alexa Grasso y Valentina Shevchenko en Noche UFC causó daños considerables a las peleadoras. Luego de que la revancha inmediata, celebrada en septiembre en Las Vegas (EE.UU.), terminara en empate, la mexicana se mantuvo como campeona del peso mosca (125 lb), pero reveló que se fracturó la mano derecha durante la pelea. La información fue difundida por la propia deportista a través de sus redes sociales este martes (3).
De todas formas, Grasso tranquilizó a sus fanáticos e informó que la cirugía para solucionar el problema se realizó con éxito. Aún no se sabe cuánto tiempo estará fuera la campeona de peso mosca de UFC, pero está ilusionada con el futuro de su carrera y ya da por hecho una tercera pelea contra Shevchenko, su gran rival. Curiosamente, anteriormente, la kirguisa reveló que también sufrió una lesión en su mano derecha y que sería necesaria una cirugía.
“¿Cuáles son las posibilidades, eh? Durante la pelea me rompí la mano. Estamos acostumbrados a que el dolor no nos detenga en nada y aunque me dolía, no pensé que fuera grave hasta que quise volver a entrenar y me di cuenta de que mi mano todavía estaba muy mal. La cirugía fue un éxito. Muchas gracias al Doctor Arroyo y al Doctor Zárate. ¡Son ángeles! Confío plenamente mi salud en tus manos de Sport Med y sé que estaré muy lista para la trilogía #AndStill”, escribió la campeona de UFC en su cuenta oficial de ‘Instagram’.
La historia de Alexa Grasso en UFC
Alexa Grasso, de 30 años, tardó un poco, pero logró triunfar en UFC, convirtiéndose en campeona de peso mosca y la primera peleadora mexicana en ostentar el título de la empresa. El talentoso deportista debutó con la empresa en 2016 y, hasta la fecha, acumula un palmarés de ocho triunfos, tres derrotas y un empate. Sus principales triunfos fueron sobre Joanne Wood, Karolina Kowalkiewicz, Maycee Barber, Randa Markos, Viviane Araújo y Valentina Shevchenko.