El evento ‘Glory Collision 5’, celebrado el pasado sábado (17), en Holanda, deparó algunos momentos bastante insólitos en los enfrentamientos de la noche. Además del nocaut involuntario que sufrió el árbitro en el evento estelar del show, otro duelo se robó el show con uno de sus competidores, Ulric Bokeme, perdiendo múltiples dientes tras ser blanco de una secuencia de golpes de su rival, Michael Boapeah.
Todavía en el primer round de la disputa, luego de recibir golpes en línea, Bokeme le dio la espalda al oponente y luego le señaló la boca, en una señal al árbitro -quien interrumpió el duelo-. Luego, el boxeador escupió su protector bucal y con él algunos de sus dientes frontales. Al darse cuenta de la escena, el juez dio por terminado el enfrentamiento, declarando vencedor a Miachel por nocaut técnico.
La decisión del árbitro no agradó a Bokeme quien, a través de sus redes sociales, protestó y pidió la revancha. El peso medio de Glory afirmó que escupió la almohadilla porque algunos de sus dientes estaban siendo tragados sin querer por los suyos.
“Hola equipo, ante todo gracias por el apoyo, los ánimos y vuestros mensajes. Estuviste allí hasta el final. La pelea no terminó después de que el árbitro me detuviera cuando escupí mi puente superior desarraigado (puente dental), que tragaba y me impedía respirar correctamente. El réferi, sin análisis, puso fin a la pelea. ¡Exigimos venganza!”, escribió Ulric Bokeme.
Situación similar en Bare Knuckle
Aunque rara, la situación no tiene precedentes en los deportes de combate. Hace unos dos meses, en el evento principal de Bare Knuckle (boxeo sin guantes), Mike Perry derrotó a Luke Rockhold por nocaut tras romperle uno de los dientes al excampeón de la UFC durante el combate.
