Luego de coquetear con la posibilidad de ascender de categoría y competir en el peso gallo (135 lb), Deiveson Figueredo amplió su estadía en el peso mosca (125 lb) luego de estar programado para enfrentar a Manel Kape en el UFC 290, el 8 de julio, en Las Vegas (Estados Unidos). El duelo contra el atleta angoleño, sin embargo, fue descartado por el ‘Dios de la Guerra’ por lo menos para la fecha estipulada.
En una entrevista con el podcast ‘Trotação Franca’, Figueiredo reveló que aún no ha sido autorizado por los médicos para volver a los octógonos. El problema es una lesión en el ojo que sufrió el excampeón en su último duelo ante Brandon Moreno, en el UFC Río, en enero de este año. En su momento, el brasileño recibió seis meses de suspensión por la comisión.
“Todavía estoy lesionado. Pedí pelea, hablé con mi manager que ya quería pelear, pero cuando me ofrecieron la pelea y hablé con mi fisioterapeuta y mi oftalmólogo, me dijeron que mi visión todavía no está al 100%. Hay días en que veo las cosas normalmente, pero hay días en que no está bien, especialmente los dos que entreno. Entonces decidieron que tengo que cumplir los seis meses (suspensión médica) que me dio el oftalmólogo (después del UFC Río)”, destacó Deiveson Figueiredo.
Nuevo rival tras cuadrilogía
Desde diciembre de 2020, Deiveson Figueiredo ha visto acción cuatro veces en la UFC y todas ellas han sido contra el mismo oponente: Brandon Moreno. Tras protagonizar la primera cuadrilogía de la historia de la liga, la tendencia es que el brasileño, número 1 del ranking, finalmente se enfrente a un nuevo rival cuando sea liberado para competir por la comisión médica.