Desde que debutó en las MMA profesional, en 2017, el campeón de jiu-jitsu Rodolfo Vieira ha levantado las expectativas de la comunidad marcial sobre su desempeño en la nueva modalidad. Luego de acumular siete victorias consecutivas, incluidas dos por la UFC, el atleta se enfrentó a su primer revés en febrero de este año cuando fue sometido por Anthony Hernández. El resultado, y sobre todo la forma en que se desarrolló la pelea, sorprendió a la afición, tanto que se convirtió en el punto de partida para un nuevo rumbo en la carrera del cinturón negro.
Tras sufrir su primera derrota, Vieira decidió cambiar de entrenamiento. Aunque aún permanece en el equipo Fusion, ubicado en Orlando (EE.UU.), el brasileño ahora cuenta con la ayuda del entrenador ‘Mano’ Santana para dirigir todas sus actividades. En una entrevista exclusiva con el informe de Ag. Fight, el peso medio de UFC (185 lb) dio más detalles sobre por qué decidió tomar este camino y los frutos que está cosechando de esta nueva asociación.
“Arreglé algunos errores que estaba cometiendo y me siento mucho mejor, otro deportista. He estado entrenando mucho más de lo que estaba haciendo, con más inteligencia, voluntad, determinación y estoy confiado para la próxima pelea. Antes de hacer todo yo mismo, me sentía abrumado. La mayor parte de la semana hice un entrenamiento al día. No molaba, pero como iba ganando tenía que pasar… En realidad no pasó, era algo que cambiaría sin importar el resultado de la última pelea”, detalló Vieira.
“Entonces conocí a ‘Mano’, que estaba entrenando con Lyoto (Machida) y le pedí que me ayudara a cuidar mi entrenamiento, que fuera mi entrenador en jefe. Lamentablemente no está aquí por su visa, pero he estado hablando con él en Brasil todos los días. Eso es lo que necesitaba. A veces no sabía lo que iba a entrenar. Llegué al gimnasio y pensé que iba a apestar, pero la gente me llamó para hacer un entrenamiento de derribo. El otro día pensé que sería jiu-jitsu, pero la gente me llamó para que me pusiera de pie. En el nivel en el que estoy, no puedo dar esta vacilación. Yo no tenía una rutina y ahora él (‘Mano’) montó la rutina y está marcando una gran diferencia en mi evolución”, agregó.
En tanto, el próximo 17 de julio, Rodolfo se enfrentará a Dustin Stoltzfus, en UFC Las Vegas 31. Pero quien piense que el brasileño está preocupado por los peligros que le puede traer su rival, especialmente en la pelea de grappling, se equivoca, pues tiene cinco victorias por sumisión en su carrera. Según el cinturón negro en jiu-jitsu, la atención se centra solo en lo que va a hacer dentro del octágono para «borrar» la última impresión que dejó en el octágono.
“Me preocupa más lo que voy a presentar. He estado entrenando mucho para ser el más completo, el más confiado, sobre todo en el golpeo, que fue mi culpa. Está tratando de imponer mi juego. Esa (última) pelea no dice lo que soy, lo que soy capaz de hacer. Sucedió, nunca dejaré de creer en mi jiu-jitsu. Sé que es otro deporte, no estoy luchando contra el jiu-jitsu. Si el chico tiene confianza y acepta cambiar de jiu-jitsu, siempre será mejor. Sé de lo que es capaz mi jiu-jitsu. Ahora estaré muy bien preparado y será completamente diferente a la última pelea. Eso es seguro”, concluyó.
Luego de construir una larga y premiada carrera en jiu-jitsu y grappling, con derecho a innumerables títulos en las modalidades de grappling, Rodolfo Vieira inició oficialmente su carrera en las MMA en 2017. En ocho peleas disputadas hasta el momento, el cinturón negro tiene siete victorias, seis por sumisión, y una derrota, sufrida, ante Anthony Hernandez, en UFC 258.
