Con dos derrotas en sus dos apariciones en la UFC, Antônio Arroyo está bajo presión para su próxima cita, este sábado (5), en UFC Las Vegas 28, contra el británico Tom Breese. Consciente de que corre el riesgo de ser cortado de la organización con otro revés, el brasileño regresó con un método que lo colocó dentro de la franquicia para retomar la senda ganadora y darle más tranquilidad.
En una entrevista exclusiva con Ag. Fight, el peso mediano (185 lb) destacó toda su preparación para este duelo en el equipo Jackson Wink MMA, ubicado en Albuquerque (EE.UU.), como lo hizo antes de su pelea en la Serie Contender y diferente a lo que hizo en sus duelos anteriores, cuando se quedó en Belém (Brasil). Según el brasileño, el campamento en el equipo, que tiene a Jon Jones como estrella principal, lo preparó mejor y señaló algunos beneficios, además de los compañeros de entrenamiento.
“Aquí tengo mucha más gente de mi tamaño, peso, varias personas de todo el mundo con diferentes especialidades, por lo que esta diversidad de atletas nos ayuda a prepararnos para el octágono. Pero el factor principal es el clima, aquí hay mucha altura, más alta que Las Vegas y me facilita la preparación física. Estaré en mi gas como estaba en la Serie Contender. Venir de Albuquerque será más ventajoso para mí”, dijo Arroyo.
Todavía en busca de su primer triunfo de franquicia, Arroyo sabe que está en una situación difícil. Últimamente, con la UFC despidiendo a los luchadores, el brasileño admitió que podría ser uno más en la lista en caso de una nueva derrota. Por ello, el deportista reforzó la importancia de una victoria el sábado.
“La victoria siempre es importante, pero el contrato está en juego. Todavía tengo una pelea más en mi contrato, pero no quiero depender de la última. A veces ellos (la UFC) incluso te despiden con tres peleas. Es complicado confiar en eso. Así que voy con todas mis fuerzas y armas para estar lo más preparado posible para esta pelea. Si es una pelea monótona, sin grandes emociones y con derrota, se complica. Si es una pelea viva y pierdo, tal vez no me saquen”, agregó el brasileño.
Antônio Arroyo, de 31 años, fue revelado en el reality show ‘Dana White Contender Series’ cuando participó en dos ediciones para asegurar su contrato con la UFC. En la organización, el brasileño compitió en dos partidos y fue derrotado por André ‘Sergipano’, en 2019, y Deron Winn, en 2020. En su carrera, el atleta compitió en 12 peleas, ganó nueve, siendo ocho por vía rápida (nocaut o sumisión), y perdió cuatro.
