Luego de dos derrotas seguidas, Rogério Bontorin se encontraba bajo presión en la UFC, pero aún así aceptó un desafío de último minuto. El brasileño estaba programado con unos 20 días de anticipación para enfrentar a Matt Schnell, en UFC 262, quien fue ascendido el pasado 15 de mayo. Debido a la cercanía del enfrentamiento, se llevó a cabo en la división peso gallo (135 lb), una por encima de la de origen de ambos luchadores y esta situación fue beneficiosa para el paranaense para evitar dejar atrás la mala fase e irse con el triunfo.
Durante la pelea que se desarrolló en Houston (EE.UU.), el brasileño fue dominante en los tres asaltos para levantar el brazo al final por decisión unánime de los jueces y sumar su tercera victoria en la organización. En entrevista exclusiva con el reportaje de Ag. Fight, Bontorin celebró su actuación y no dejó de provocar a su oponente.
“Mientras tuve que entrenar, luché bien. Si tuviera más tiempo para entrenar la pelea, no habría pasado la primera ronda. Por lo que estudié de su juego, sabía que querría agregar volumen, pero su mano es liviana, me golpeó y no hizo nada. Así que ni siquiera estaba preocupado por ser golpeado por él, pero cuando él fue golpeado por mí, ya se suavizó. Estaba imponiendo mi ritmo así, cuando quería crecer demasiado le puse la mano. Siempre que acertaba, meneaba, en las tres rondas era así”, detalló.
Sin embargo, Bontorin tuvo que lidiar con un revés que le costó el 20% del pago que recibió para pelear. A pesar de que solía alcanzar las 125 lb para pelear en el peso mosca, el atleta estaba por encima del límite de tolerancia del peso gallo en el pesaje oficial del espectáculo. En tal sentido, el brasileño explicó lo sucedido y se sintió incómodo por no haber cumplido con su obligación.
“Tuve que perder mucho peso. Cuando acepté la pelea dije que era demasiado pesado. Con 57 kg no pude y pude intentar superar los 61 kg. Casi lo golpeo, fue solo un poco. Si iba más allá en este proceso de pérdida de peso, corría el riesgo de que se cancelara la pelea. Creo que en 20 días incluso tomé mucho. Encuentro una falta de respeto para no acertar. Me molestó eso, pero hacer qué, ¿no?”, explicó el luchador de 29 años de edad.
Además de retomar la senda del triunfo, Bontorin también festejó poder el competir en su división original. Antes de ingresar a la UFC, el ‘carioca’ actuaba en el peso gallo, pero debido a la ‘Contender Series’, programa que lo llevó a la UFC, decidió cambiar de división. Luego de vivir esta experiencia, apuntó que tiene en mente cambiar de clase.
“En el futuro, tengo la intención de escalar, porque estamos envejeciendo y se hace más difícil batir el peso. Es un sentimiento que tengo por el futuro. Puedo recuperar más peso, soy mucho más fuerte. Siempre es bueno volver a los viejos tiempos”, explicó.
Tras participar en el programa ‘Contender Series’, Rogério Bontorin comenzó su carrera en la UFC con dos victorias consecutivas, derrotando a Magomed Bibulatov y Raulian Paiva, respectivamente. Posteriormente, el peso mosca acumuló dos reveses seguidos, hasta que acabó con esta fase negativa superando a Matt Schnell y ahora ocupa el octavo lugar del ranking de la categoría.