Con la promesa de Dana White de que lideraría una cartelera de la UFC en noviembre en Las Vegas (EE.UU.), Khamzat Chimaev aparentemente lucha por encontrar a alguien en la parte superior del ranking de peso welter (170 lb) que esté dispuesto a enfrentarlo. Al igual que Leon Edwards y Stephen Thompson, sus compañeros del top 10, Michael Chiesa no muestra interés en el enfrentamiento contra el ruso naturalizado sueco, la nueva sensación de la organización, al menos por ahora.
En conversación con la prensa en la ‘Isla de la Lucha’, donde se ha desempeñado como comentarista de la UFC, Chiesa consideró que la relación entre riesgo y recompensa por enfrentar a Chimaev en este momento no es compensatoria para los principales atletas de la división. Pese a ello, el estadounidense reconoció el talento que ya demostró el joven “sensación” en el octágono e indicó que, si el sueco consigue un lugar en el ranking pronto, la historia puede cambiar.
“Si me gana, ocupa mi lugar (en el ranking). Si lo golpeo, la gente dirá: ‘Oh, fue un destello en la sartén’. ¿Entiendes lo que quiero decir? Probablemente yo tampoco suba en la clasificación. Es como, hombre, estoy tratando de luchar por el título mundial. Tienes que hacer negocios inteligentes. El chico es bueno. Respeto tus habilidades. No sé si esta es la pelea que quiero ahora. ¿Si le gana a un chico y logra entrar en el ranking? Esta es una historia diferente”, explicó Chiesa, antes de completar.
“Entiendo por qué estos tipos no quieren pelear con él. No es que tengan miedo. No hay ningún chico en el equipo que le tenga miedo a alguien. Cuando alguien dice: ‘¿Joe Schmo le tiene miedo a John Smith?’ Como, m*****”, concluyó.
Viniendo de tres victorias consecutivas, Michael Chiesa no se ha presentado desde enero de este año, cuando superó a Rafael dos Anjos por puntos, en UFC Raleigh. El estadounidense, octavo en el ranking de peso welter, se está recuperando de una cirugía en julio pasado y proyecta su regreso a principios de 2021.
Khamzat Chimaev, por su parte, se ha mostrado muy activo desde su debut en el octágono más famoso del mundo, en julio de este año, en la primera visita de la UFC a la ‘Isla de la Lucha’, en Abu Dhabi (EAU). El sueco ganó sus dos primeros partidos, contra John Phillips y Rhys McKee con una diferencia de diez días entre peleas, el nuevo récord de la organización. Después de luchar para obtener una visa para ingresar a Estados Unidos, el luchador necesitó solo 17 segundos para noquear a Gerald Meerschaert el 19 de septiembre en Las Vegas.