Un nuevo capítulo en la saga de la desaparición de Aniah Blanchard, la hijastra de Walt Harris, el peso pesado de UFC, salió a la luz el miércoles. Ibraheem Yazeed, el principal sospechoso acusado de secuestrar a la niña, compareció ante el tribunal de Alabama para una audiencia preliminar sobre el caso.
En la audiencia, el juez Russell Bush ordenó a Yazeed someterse a pruebas de ADN después de que la evidencia descubriera que un hombre estaba en el Honda CR-V 2017 recuperado, el vehículo de la víctima. El equipo de investigación también encontró sangre en el vehículo e «indicativo de que alguien sufrió una lesión potencialmente mortal». Aún ante el tribunal, el juez del caso también negó una solicitud de fianza.
Entonces, al menos por ahora, Yazeed permanecerá en prisión. Y, según el sitio web de WVTM, un testigo afirmó durante la audiencia del miércoles que vio a Ibraheem liderando a Aniah contra su voluntad. También según el portal, el hombre no había informado de lo que había presenciado antes porque su esposa le habría dicho que «se mantuviera al margen».
Blanchard se considera desaparecida desde el 24 de octubre. Desde entonces, Walt Harris y su familia han estado utilizando sus redes sociales para obtener información para ayudar a resolver el caso y poner fin a la desaparición de la niña. Mientras tanto, el peso pesado, sacudido por la condición de su hijastra, abandonó la pelea contra Alistair Overeem, inicialmente programada para el 7 de diciembre, en la pelea principal de UFC Washington. Jairzinho Rozenstruik fue elegido en su lugar.