Georges St-Pierre es el ex campeón de peso welter de UFC y campeón de peso mediano – Diego Ribas
Durante mucho tiempo, Georges St-Pierre intentó en todos los sentidos programar un duelo contra Khabib Nurmagomedov, actual campeón de peso ligero de UFC (70 kg). Sin éxito en sus intentos, el canadiense, antiguo titular de los cinturones de peso welter (77 kg) y peso mediano (84 kg), decidió anunciar su retiro del deporte en febrero de 2019, aunque insinuó que podía ponerse los guantes nuevamente si le ofrecían la disputa soñada contra el ruso.
Cuando se le preguntó, en el podcast ‘MMA Trufan’, sobre su insistencia en pedir la confrontación contra Nurmagomedov, ‘GSP’ citó el «aura de invencibilidad» que rodea al ruso, invicto después de 28 peleas en su carrera, para justificar su interés. Según el canadiense, la oportunidad de ser el primer luchador en derrotar a Khabib le atrajo más que la posible ganancia financiera que habría obtenido si Ultimate decidía casarse con la pelea entre dos de sus estrellas principales.
“Khabib fue muy emocionante para mí porque, como luchador, un luchador no piensa como una persona normal. Un luchador siempre quiere pelear con el tipo que parece invencible, el tipo que parece ser el luchador perfecto, que es invencible. Tiene un aura de invencibilidad. Entonces, significa que si lo hago (lo supero), seré el primero en hacerlo. No es una cuestión de dinero. Sí, el dinero está ahí, pero no es una cuestión de dinero al principio. Es una cuestión de gloria, de autorrealización, de hacerlo de una manera que permanecerás en la historia para siempre, para mí mismo”, explicó St-Pierre.
Sin embargo, el interés de Georges St-Pierre en medir la fuerza contra atletas considerados prácticamente imbatibles parece ser poco selectivo. Mientras dominaba la división de peso welter de UFC, el canadiense vio a Anderson Silva reinar en la categoría superior, pero nunca mostró claramente su deseo de enfrentarlo. La súper pelea entre los dos campeones de Ultimate más dominantes en ese momento fue especulada ampliamente por los fanáticos y los medios especializados, pero nunca se concretó.
